"Participar en Benín fue una experiencia inolvidable donde pude conocer a personas de distintos países y observar otras realidades, así como comprender la complejidad de los problemas y la necesidad de empatía para el tratamiento de los derechos sexuales y derechos reproductivos" afirma Óscar López Espejo representante de Bolivia en el Diálogo Mundial de la Juventud desarrollado en Cotonú, Benín. Actualmente es parte de la iniciativa "Actúa, detén la violencia" que busca prevenir todo tipo de violencia, abordando principalmente los Objetivos de Desarrollo Sostenible 4 y 5. Desde esta iniciativa Óscar postuló para ser parte de la experiencia en Benín, siendo posteriormente seleccionado. El activo liderazgo que realiza Óscar también se expresa siendo parte de la iniciativa Desafío ODS; y formando parte del Consejo Plurinacional de la Juventud en representación de la Red "Tú Decides".
A sus 22 años, Óscar ya es líder juvenil que promueve el ejercicio de los derechos sexuales y derechos reproductivos. Cursa estudios de Administración de Empresas en la Universidad Mayor de San Andrés y es un apasionado con el compromiso de cuidado del medioambiente. Durante su niñez fue introvertido y un tanto tímido, pero eso cambio con el paso del tiempo. Forma parte de la Red Nacional de Líderes y Lideresas Juveniles “Tú decides” Regional La Paz, espacio donde inicialmente participó a influencia de sus hermanos mayores que ya eran miembros.“En ese espacio fue donde escuché hablar de temas como la prevención del VIH, siendo que era un tema mediático bastante conocido a nivel internacional, la información en Bolivia no era difundida de manera amplia. En la Red se realizaban campañas de información y movilización social, para la prevención” recuerda.
En esa época el teatro fue el espacio donde Óscar encontró la oportunidad perfecta para comunicar de forma sensible lo que pensaba y sentía. Siendo parte del elenco “Chuquiago Juvenil” hizo presentaciones siendo estatua móvil, y sin decir una sola palabra expresaba lo que sentía. “Me parecía genial, no me ponía nervioso y actuaba con la agrupación, haciendo recreaciones del cotidiano vivir, con el objetivo de hacer prevención ante la violencia”. Recuerda una presentación que efectuó en la plaza San Francisco de la ciudad de La Paz. “Yo personificaba al hijo que sufría la violencia ejercida por sus padres, pues me jalaban del cabello y de las orejas. Mientras hacíamos la presentación recuerdo a un niño que me miró y dijo: a mí también me hace eso mi padre”. Esa experiencia fue un impulso importante en la vida de Óscar para trabajar en la creación de contenidos orientados, desde el audiovisual, a generar conciencia en las personas ante la violencia. “Yo dije, no todo está perdido”. Mientras fue transcurriendo el tiempo Óscar fue participando en espacios juveniles donde fortaleció sus capacidades, y fruto de este proceso reconoce que “para poder avanzar en los temas, es importante primero trabajar desde uno mismo, en el nivel netamente personal, y luego hacerlo con las personas”
El diálogo, la participación comprometida y el acceso a información son fundamentales para el trabajo que desarrollan jóvenes como Óscar. "En Benin se habló de la necesidad de una mayor representación y participación de las juventudes en los órganos de decisión a nivel nacional e internacional, aspecto con el cual estoy de acuerdo. Sin embargo, desde la experiencia personal muchas veces me he encontrado con situaciones frustrantes donde autoridades que deben estar presentes en espacios de diálogo con jóvenes, simplemente están unos minutos, o directamente no asisten, delegando a otros la tarea que les corresponde. Es fundamental escuchar a las y los jóvenes y ser parte de estos espacios, para poder avanzar en la política pública real, que escuche y permita construir de manera conjunta nuevas perspectivas”. El líder juvenil explica que cuando están las y los tomadores de decisión, en espacios donde también participan las y los jóvenes -y se escuchan ambos- entonces las decisiones son legítimas y benefician a todas y todos.
Para Óscar es importante abordar temas como la educación integral en sexualidad porque: “entender esto nos ayudará significativamente a luchar contra la discriminación, las estigmatizaciones y tabúes que existen en la sociedad y que son el resultado de los sesgos existentes. Es importante que existan espacios para discutir los temas, entendiendo que hay distintas miradas y que todas merecen ser respetadas”.
En criterio del líder juvenil, Benin fue un espacio que aportó aún más en su empoderamiento. “Tengo mucho por hacer, y ya he comenzado de forma articulada” afirma.
Más de 400 jóvenes como Óscar se dieron cita en Cotonú, Benín del 4 al 5 de abril de este año, donde analizaron y construyeron propuestas respecto a la Salud Sexual y Reproductiva, así como a la necesidad de transformar la educación para transformar vidas ampliando oportunidades a jóvenes; la inclusión para proteger los derechos humanos y promover la igualdad de género para los jóvenes; la creación de futuros resilientes en un mundo en crisis; así como la necesidad de alzar las voces desde el poder de 1.900 millones de jóvenes. El Diálogo Mundial de la Juventud celebrado en Cotonú fue organizado por el UNFPA, el organismo de las Naciones Unidas encargado de la salud sexual y reproductiva, el Gobierno de la República de Benin y los Gobiernos de Dinamarca y los Países Bajos; logrando reunir a jóvenes activistas, ministros de los Estados miembros y organizaciones regionales e intergubernamentales para determinar las prioridades impulsadas por los jóvenes que se llevarán a la Cumbre del Futuro de las Naciones Unidas en septiembre de 2024. Asimismo, el Diálogo fue parte de una serie de actos para conmemorar el 30º aniversario de la Conferencia Internacional sobre la Población y el Desarrollo (CIPD), que puso en marcha un programa de acción mundial para situar los derechos de las personas en el centro del desarrollo sostenible.
Escrito por: rportugal@unfpa.org
