La última semana de julio, cerca de 70 policías con grado de sargento primero y alumnos del diplomado en administración policial con el grado de mayor, formaron parte de un proceso de capacitación en base al módulo de masculinidades positivas para la prevención de la violencia en razón de género dirigido a servidores públicos policiales que brindan servicios de atención a mujeres víctimas de violencia.
En el curso se ofrecieron dinámicas, videos y reflexiones que contribuyeron a la desnormalización de las múltiples formas de violencia, el machismo y el patriarcado, así como a la construcción de formas positivas de ser hombres libres de cualquier forma de violencia. Los significados culturales de la masculinidad y feminidad, la identificación de las falsas ideas asociadas a los roles de género, la responsabilidad institucional frente a la violencia y cómo identificar la violencia dentro del campo laboral y sus consecuencias fueron algunos de los temas sobre los cuales reflexionaron.
Los policías coincidieron en que las herramientas de los cursos con perspectiva de género y de masculinidades positivas, les otorgan herramientas que les ayudan a realizar una labor más sensible y respetuosa de los derechos humanos. Al aprender a identificar los estereotipos y prejuicios patriarcales que generan ciclos de violencia machista y que muchas veces se reproducen de forma inconsciente se puede comenzar a visibilizarlos, cuestionarlos e iniciar procesos de cambio.
Al finalizar este proceso, las autoridades policiales solicitaron ampliar este tipo de talleres a diferentes unidades sobre todo a aquellos quienes se encuentran en contacto directo con la población o que reciben denuncias o casos de violencia, también la de realizarla en diferentes departamentos ya que ayudaría en su formación y también en la ejecución de replicas a los estudiantes de primer año de la escuela de policial.
La violencia contra las mujeres es sin duda una de las principales violaciones de derechos humanos y un importante obstáculo para el desarrollo de nuestro país. Es tarea de todos y todas trabajar por su erradicación.
Este tipo de talleres se realiza gracias al UNFPA con el apoyo de KOICA en el marco del proyecto: “Promoviendo la igualdad de género para el ejercicio de los derechos sexuales y reproductivos de adolescentes en Bolivia”.
